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11-ene.-2024, jueves de la 1.ª semana del Tiempo Ordinario

Permítenos decir las palabras del leproso: “Si quieres, puedes limpiarme”

En tus manos nos colocamos, Señor, en este día que comienza a clarear. Día para iniciarlo con la felicidad de saber que nos hemos podido levantar, que nos das la alegría de nuestras familias y amigos y el deseo de amarte y servirte en nuestros hermanos. Señor, tú nos levantas de nuestros temores y angustias, nuestros desánimos y dificultades. Disponnos a compartir con todos nuestra alegría, nuestra aceptación y nuestro afecto, como tú lo haces compartiendo nuestra pobreza.

Permítenos acompañarte en este día y poder compartir tu vida y tu generosidad: una especie de “24 horas tuyas”. En la mañana inicias tu camino con tus discípulos y curas al leproso que sale a tu paso. Permítenos decir las palabras del leproso: “Si quieres, puedes limpiarme”, límpiame de todo lo negativo que hay en mi vida; ahora, limpios en el corazón, volvemos a emprender nuestro camino. En la tarde te vemos rodeado de gente y tú dándoles salud. Después de la noche, madrugas para orar en un lugar apartado.

Señor, qué bueno realizar tus obras, ya que el Padre nos ha creado para cosas grandes: vivir, crecer, amar, servir, entregar. Permítenos que, al caer de la tarde, podamos tener la satisfacción de haber realizado el bien a nuestros hermanos; haber ayudado al que nos saldrá al paso en este día, ya no leproso, pero sí el necesitado de tu palabra y de tu amor; haber levantado al hermano caído y necesitado de ti. Gracias te damos por tenernos como tus discípulos.

A María Nuestra Madre nos encomendamos y pedimos su protección y auxilio.

Un muy feliz jueves para todos, contando con tu bendición, Señor. Seguimos orando por nuestras familias, nuestros enfermos, nuestros hijos e hijas, nuestros trabajos.

PÍLDORAS DE FE

Oración de Calma

Señor, gracias por permitirnos iniciar este nuevo día, sabiéndonos sostenidos por tu fuerza. Gracias porque a través de tu Evangelio, podemos comprender que eres un Dios que se derrite en compasión por aquellos que claman a ti con humildad y se presentan con un corazón abierto y sencillo. Te rogamos, Divino Médico, que atiendas nuestras oraciones, Tú sabes lo que necesitamos, danos según tu voluntad. Amén.

Pensamientos para el Evangelio de hoy

* «Jesús, sobre todo con su estilo de vida y con sus acciones, ha demostrado cómo en el mundo en que vivimos está presente el amor. Este amor [misericordioso de Dios] se hace notar particularmente en el contacto con el sufrimiento, la injusticia, la pobreza» (san Juan Pablo II).

* «Vivimos en este mundo en el que Dios no tiene la evidencia de lo palpable. Sólo se le puede encontrar con el impulso del corazón y reconocer que no sólo vivimos de “pan”, sino ante todo de la obediencia a la Palabra de Dios» (Benedicto XVI).

* «Los hombres, cooperadores a menudo inconscientes de la voluntad divina, pueden entrar libremente en el plan divino no sólo por sus acciones y sus oraciones, sino también por sus sufrimientos (cf. Col 1,24) Entonces llegan a ser plenamente ‘colaboradores de Dios’ (1Cor 3,9) y de su Reino» (Catecismo de la Iglesia Católica, n. 307).

Autor:
José Hernando Gómez Ojeda, pbro.