«Sed fuertes, no temáis». Con estas palabras de esperanza demos gracias a Dios por esta semana que iniciamos, por este día que comienza a despertar y por los sentimientos con que esperamos vivirlo. Señor, ayúdanos a poner en ti toda nuestra esperanza y a confiar en que tú nos alzarás de nuestro desaliento, de nuestros miedos y de nuestra resignación pasiva a los males que nos agobian. Cúranos de nuestras culpas y pecados para que seamos personas que saltemos de optimismo y alegría a causa tuya. Ayúdanos para que, con alegría y entusiasmo, continuemos tu obra de amor y misericordia en los que viven en tristeza y soledad, mientras recordamos con gratitud cómo nos has levantado por encima de nuestras limitaciones y dificultades. Confiamos en ti, que sabes dónde están nuestras heridas y cómo curarlas. Queremos que nos perdones en la oración, que nos mires como el médico del alma que eres. Somos como el paralítico que necesita ser curado. Queremos que nos toques y nos levantes para que tomemos la camilla y vayamos con ella a ayudar a nuestros hermanos paralíticos del alma, no importando las dificultades que tengamos que enfrentar, ya que confiamos y esperamos en Ti. Amén.
Una esperanzadora, productiva, y Santa semana para todos y un muy ilusionado lunes.
Oración de Paz y Calma
«¡Ojalá que siempre estén dispuestos como ahora a temerme y a cumplir mis mandamientos! Así ellos y sus hijos serán siempre felices» (Deuteronomio 5, 29).
Querido Dios, venimos a tu presencia sabiendo que eres nuestro más grande refugio, especialmente en los tiempos difíciles. Hay tantas cosas que nos afligen y causan ansiedad. Pero confiamos en que eres el Dios de la paz y nuestro auxilio inmediato. Permite que tu Santo Espíritu nos embriague con su fuerza y que nuestro corazón encuentre serenidad y quietud en ti. Que podamos siempre cumplir con tus mandamientos, no por obligación, sino por amor. Amén. (Autor: Qriswell Quero de Pérez)
ORACIÓN PARA INICIAR EL LUNES
“Señor padre Santo, tú conoces mi corazón y mis pensamientos, por eso sabes realmente lo que estoy deseando en estos momentos, pero necesito que me escuches como solo tú, Padre amado, sabes hacerlo. Hoy lunes quiero que me des la oportunidad de llevar todos mis planes a cabo, que durante toda la semana pueda disfrutar de tu bendición; que hoy sea un día muy especial. Quiero irradiar felicidad, mostrar la seguridad que tú me has enseñado a tener, para confiar y esperar en ti. Amén”.
