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1-feb.-2024, jueves de la 4.ª semana del Tiempo Ordinario

«Cumple los mandamientos del Señor, tu Dios; camina por sus sendas y observa sus preceptos, órdenes, decretos e instrucciones»

Hermosa y esperanzadora mañana la que nos regalas en este inicio de febrero. Gracias, Señor, por las maravillas que harás en nosotros, porque sabemos y confiamos plenamente en que este será un buen mes, bendecido en todas nuestras obras.

Hoy nos pides que confiemos en ti, que no necesitamos llevar cosas inútiles para el camino y que lo único que tenemos que llevar es tu presencia en nuestros corazones. Que ellos estén llenos de esperanza de fe y de caridad, ya que llevamos tu presencia a nuestros hermanos, a quienes esperamos llenar de la misma fe con la que queremos iniciar el recorrido de este mes.

Tú enviaste a tus discípulos a llevar su Buena Noticia de salvación y su poder curativo a la gente en su vida diaria. Ayúdanos a unir siempre la fe a las realidades de la vida diaria, para que tu palabra y tu vida nos ayuden a crear unidad entre lo que somos, creemos y hacemos. Hermosas y edificantes son las palabras de David a su hijo Salomón. Danos el don de la sabiduría para dejarnos guiar por tu Espíritu y realizar lo que tú esperas de nosotros. ¿Qué más quiere un buen padre, sea rey o no, que a su hijo le vaya las cosas bien, que la alegría reine en su corazón? Pues eso es lo que desea David para su hijo Salomón y le muestra el mejor y único camino para ello: «Cumple los mandamientos del Señor, tu Dios; camina por sus sendas y observa sus preceptos, órdenes, decretos e instrucciones».

En tus manos colocamos el inicio de este mes. Concédenos que el don de tu gracia ilumine nuestros senderos. Danos fortaleza para tender la mano al caído. Concédenos el don de saber perdonar de corazón; generosidad en el tiempo para saberlo aprovechar con el que se encuentra en soledad y tristeza. Que nuestra oración sea dirigida a ti, para que pases tu mano sanadora en nuestros hermanos enfermos, en las familias que pasan necesidades. Que sembremos la buena semilla de tu amor, para poder cosechar felicidad y alegría, esperanza y caridad. Amén.

Feliz jueves vocacional, de paciencia y de bendiciones. Nuestro amor sea sembrado en el corazón de nuestros hermanos.

FELIZ Y SANTO INICIO DE MES.

Autor:
José Hernando Gómez Ojeda, pbro.