Nace un nuevo dia en este caminar que nos regalas e iniciamos la aventura de nuestra jornada; lo hacemos dándote gracias porque nos despiertas a cumplir tu santa voluntad. No sabemos cómo va a ser nuestra jornada, pero confiando en ti, esperamos que sea de cosas lindas y satisfacciones y si tenemos obstáculos ayúdanos a superarlos. No permitas que la cizaña de la discordia, del egoísmo y la indiferencia nos invada; por el contrario, la buena semilla del amor, la generosidad, solidaridad y fraternidad sean motivos de buena y abundante cosecha.
Este martes de armonía, comprensión y unidad sean motivo de felicidad y alegría. Los abrazo y los bendigo.
PALABRAS DEL SANTO PADRE
De este modo, Jesús habla de nuestro mundo, que en realidad es como un gran campo, donde Dios siembra trigo y el maligno cizaña, y así el bien y el mal crecen juntos. (…) Hay, sin embargo, un segundo campo en el que podemos limpiar: es el campo de nuestro corazón, el único en el que podemos intervenir directamente. También allí hay trigo y cizaña, de hecho, es desde allí desde donde ambos se extienden al gran campo del mundo. Hermanos y hermanas, nuestro corazón, en efecto, es el campo de la libertad: no es un laboratorio aséptico, sino un espacio abierto y, por tanto, vulnerable. Para cultivarlo adecuadamente, es necesario, por una parte, cuidar constantemente los delicados brotes de bondad y, por otra, identificar y erradicar las malezas, en el momento justo. Así pues, miremos en nuestro interior y examinemos un poco que ocurre, lo que crece en mí. Que está creciendo en mi de bien y de mal. Existe un hermoso método para hacerlo: aquello que se llama el examen de conciencia, que es ver qué sucede hoy en mi vida, qué me impactó en el corazón y qué decisión tomé. Y esto sirve precisamente para verificar, a la luz de Dios, donde están las hierbas malas y donde la semilla buena. (Ángelus, 23 de julio de 2023)