Que tu santa bendición nos acompañe al iniciar un nuevo día. Señor, tú eres misericordioso y compasivo; Tú sabes con qué frecuencia nuestro fervor se enfría y qué pobres de corazón somos a veces, cuando pensamos que somos ricos y que estamos seguros por pertenecer a ti. Te pedimos que sepamos encontrarte en lo más profundo de nuestros corazones; ayúdanos a buscarte sinceramente para que tu presencia nos siga cambiando y para que vivas realmente en medio de nosotros. Tú estás a la puerta y llamas para compartir con nosotros tu vida y tu esperanza. Que sepamos abrirte las puertas de nuestros corazones y acogerte con entusiasmo. Que sean tu pan de la palabra y tus actitudes los que nos nutran, para que podamos vencer todo mal.
Al iniciar esta semana, qué hermoso que tú nos digas como a Nicodemo: baja de tu indiferencia, de tu egoísmo y tu desesperanza porque es necesario que yo me hospede en tu corazón. Bendícenos, guárdanos y protégenos, presérvanos de todo mal y guiamos en este caminar. Bendice las obras de nuestras manos y concédenos la gracia del servicio y el amor, iniciando nuestra semana laboral.
Feliz y esperanzador martes. Nuestra Madre nos auxilie e interceda por nosotros.
Oración de Paz y Calma
"Bendito sea el Señor, porque oyó la voz de mi plegaria; el Señor es mi fuerza y mi escudo, mi corazón confía en él. Mi corazón se alegra porque recibí su ayuda: por eso le daré gracias con mi canto" (Salmo 28,6-7).
