En la inmensidad de tu misericordia y amor, nos regalas esta mañana y este día, para poder meditar lo que quieres y esperas de cada uno de nosotros.
Tú nos dijiste: «no he venido a abolir la ley, sino a darle cumplimiento». Interpretas la ley desde el amor al prójimo: «vosotros sois la sal y la luz del mundo»; el «no matarás» incluye «no enfadarte, ni insultar»; «no cometerás adulterio» incluye «no mirar con malos deseos a una mujer»; «no jurarás en falso», sino que «cumplirás lo que prometiste al Señor con juramento». Y ante la ley del talión: «ojo por ojo y diente por diente». tú nos propones «el amor a los enemigos». Que los mandamientos sigan siendo nuestra sabiduría e inteligencia y nos muestren el camino que quieres que recorramos. A ti te alabamos, te bendecimos y te glorificamos. Te damos gracias y te pedimos tu bendición.
Un muy feliz, productivo y cumplidor miércoles. Abrazos y bendiciones.
PALABRAS DEL SANTO PADRE
Jesús nos hace comprender que las reglas religiosas son útiles, son buenas, pero son solo el inicio: para darles cumplimiento, es necesario ir más allá de la letra y vivir su sentido. Los mandamientos que Dios nos ha dado no deben encerrarse en la caja fuerte asfixiante de la observancia formal, pues de lo contrario nos quedamos en una religiosidad externa y desapegada, siervos de un “dios amo” en lugar de hijos de Dios Padre. Jesús quiere esto, que no tengamos la idea de servir a un Dios amo, sino al Padre, y por esto es necesario ir más allá de la letra. Dios no razona con cálculos y tablas; Él nos ama como un enamorado: ¡no hasta el mínimo, sino hasta el máximo! No nos dice: “Te amo hasta cierto punto”. No, el verdadero amor nunca llega hasta un punto determinado y nunca se siente satisfecho; el amor va siempre más allá, no puede por menos. El Señor nos lo mostró dando su vida en la cruz y perdonando a sus asesinos. Y nos ha confiado el mandamiento que más aprecia: que nos amemos unos a otros como Él nos ha amado. ¡Este es el amor que da cumplimiento a la Ley, a la fe, a la verdadera vida! (Ángelus, 12 de febrero de 2023)