En esta agradable y fresca mañana te damos gracias, Señor, por el don de la vida te bendecimos, te glorificamos porque nuestro despertar lo hacemos en esperanza. En este día de descanso, dedicado a ti y a nuestra familia, te damos gracias por esta semana que estamos terminando, por nuestras labores, por el bien que hemos podido hacer y por todo lo que deseamos seguir haciendo.
Dentro de nosotros y en nuestro entorno, experimentamos la lucha actual entre el bien y el mal. Haznos reconocer el mal que hemos hecho, danos fe en tu inconmensurable misericordia y otórganos la alegría de tu perdón; que de nuevo recobremos la Armonía y superemos toda maldad.
Porque a veces hemos negado que tú eres verdaderamente nuestro salvador, nuestro amigo, nuestro hermano mayor, porque hemos tenido actitudes negativas y hemos pretendido confiar en nuestras propias fuerzas, olvidando que todo lo puedes y todo lo perdonas. Danos fe y confianza en tu infinita misericordia y otórganos la alegría de tu perdón. danos la fortaleza necesaria para reconocer nuestros propios errores y no echar la culpa a los demás. Asumir nuestras debilidades y enfrentar el mal recurriendo a tu misericordia. Después de tu perdón, llenos de esperanza y confianza en ti, miramos con optimismo esta nueva semana que iniciaremos y lo hacemos bajo la inspiración del Espíritu Santo. Por todo lo que nos concediste y nos concederás te damos gracias, Señor. Haz tu santa voluntad en cada uno de nuestros corazones, teniendo en cuenta que tus palabras son verdad y vida: «el que haga la voluntad de Dios, ese es mi hermano y mi hermana y mi madre». «no nos dejemos tentar del mal». Amén.
Feliz y reconciliador Domingo, compartido en familia, disfrutando nuestro puente.
